Imagínate que has pasado un día increíble. Estuviste compartiendo con tus amistades, disfrutando y riéndote como no lo habías hecho en mucho tiempo. En ese momento pensabas, ¡que bien lo estoy pasando! Luego decides regresar a tu casa. Cuando vas de camino, el carro resbala al frenar e impacta un árbol. Tu saliste ileso del accidente, pero el impacto daña el tren delantero de tu carro. Al final, llegas a tu casa en una grúa con tu carro dañado. La pregunta que hago es: ¿Cómo describirías tu día?, ¿fue un buen o un mal día?
Si te das cuenta la vida en general es así. Nos suceden cosas buenas y cosas no tan buenas. Y sin duda cuando algo malo ocurre nos generará un malestar emocional, pero nuestro estado de ánimo será determinado por nuestro enfoque. En muchos casos tendemos a enfocarnos en los aspectos negativos de la vida, minimizando las cosas buenas que nos suceden. Esto hace que percibamos nuestra vida como una llena de infortunios, provocando en nosotros un sentimiento auto conmiseración y desarrollando una mentalidad pesimista. Es por esto por lo que te quiero presentar la herramienta de la gratitud para que de una forma consciente aprendas a identificar lo bueno de tu vida, a desarrollar una mentalidad optimista y generar cambios en tu nivel de bienestar.
¿Qué es la Gratitud?
El Dr. Robert Emmon, define la gratitud como un sentimiento de asombro, agradecimiento y aprecio por la vida. La gratitud nos ayuda a ver el lado bueno de los contratiempos que se presentan en nuestra vida. La Dra. Lyubomirsky dice que la gratitud es un antídoto contra las emociones negativas, un neutralizador de la envidia, la avaricia, la hostilidad, la preocupación y la irritabilidad. Los resultados afirman que las personas que practican la gratitud regularmente, al notar y reflexionar intencionalmente sobre las cosas por las que están agradecidos, experimentan emociones más positivas, duermen mejor, extienden más compasión y bondad hacia los demás, son más espirituales y religiosos, más indulgente y menos materialistas que las que estás menos predispuesta a la gratitud.
Como has visto el ser agradecido tiene grandes beneficios para nuestra vida; pero el único problema es que en muchas ocasiones no surge de forma natural y puede hasta ir en contra de nuestra forma de ser. Es por esto, que para adquirir esta herramienta tenemos que realizar acciones conscientes y ser persistentes en ellas. Esto provocará que al pasar el tiempo desarrollemos un habito saludable de gratitud.
El Diario de Gratitud
En una ocasión, el Dr. Martin Seligman, le pidió a un grupo de pacientes que presentaban síntomas de depresión, que al final de cada día anotaran en un diario tres cosas por las cuales estaban agradecidos (ejemplo: por sus hijos, salud, trabajo, su mascota, etc.). Al cabo de varias semanas pudo observar en sus pacientes cómo disminuían los síntomas de depresión y aumentaban los niveles de bienestar emocional.
El diario de gratitud es una excelente forma para desarrollar este hábito saludable. Si lo deseas lo puedes intentar. Tan solo elige un momento del día en el cual dispongas de varios minutos. En ese momento, te recomiendo que cierres tus ojos y pienses en eso por lo que puedes dar gracias. Tomate tu tiempo para pensar y visualizar en ese momento. Observa cómo reacciona tu cuerpo ante ese recuerdo. Ahora, es el momento de dar gracias. Al terminar, escribe lo que pensaste y sentiste. Esto, lo puedes hacer diariamente o por lo menos una vez por semana. Espero que te seas de mucha utilidad.
Antes de terminar te pregunto: En este día,